Washington, D.C.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que su país es hoy “más fuerte que nunca” y que basados en esa fortaleza pronto plantarán la bandera estadunidense en Marte tras volver a pisar la Luna.
Al emitir un discurso desde el Monumento a Lincoln en la capital estadunidense en ocasión de la fiesta nacional del 4 de julio, Día de la Independencia de Estados Unidos, el mandatario saludó los esfuerzos y logros de diversas dependencias del gobierno, en especial las fuerzas armadas.
Mientras tanto, sus opositores criticaron el gasto que generó la celebración, por arriba de los 2.5 millones dólares solo por el uso del lugar, además del costo por el vuelo de helicópteros y aviones de la Fuerza Aérea y el traslado de invitados especiales.
Para la ocasión, el presidente vistió un traje azul oscuro con una corbata roja y llegó acompañado al evento por su esposa Melania, quien portaba un vestido blanco con dos delgadas rayas horizontales en color negro y dos más en color amarillo distribuidas en la falda.
El último desfile militar en la capital estadunidense se remonta a 1991, cuando se realizó para celebrar el fin de la Guerra del Golfo.