Amor de perros es incondicional
No distinguen ‘razas’ ni ‘defectos’ humanos. El Refugio de Mascotas les da asilo
ENTREGADO. Duque, un perro de raza Bellinghausen.
”Los perros nos quieren por encima de todo, aunque no seamos de raza, nos quieren como seamos: flacos, gordos o feos”.* Maité Pineda Álvarez, veterinaria.
Prefirió su hogar de siempre: El Refugio de Mascotas llamado Fundación de Rescate y Adopción de Mascotas (FRYAM). Unas veces no lo quisieron, y en otras, no quiso quedarse.
Se trata de Duque, un perro de raza Bellinghausen, de largas y arrastradas orejas café y blanco.
Es besucón, enamorado, cariñoso y apapachador que brinda alegría, afecto, enamora y entrega su corazón a su ama, Maité Pineda Álvarez, quien aparte de sus carreras de química y contadora se graduó de veterinaria, por su amor a los animales.
Duque llegó flaco porque su dueño, un obrero petrolero, ya no lo podía atender. Ya mero cumple seis años.
Maité dice que quiere más a los animales que a los seres humanos, porque son fieles: “ellos nos quieren por encima de todo, aunque no seamos ‘de raza’, nos quieren como seamos: flacos, gordos o feos”.
Ellos son fieles, sencillos y súper agradecidos.
Así es Duque.”Quien lo quiere, quien te quiere” y Duque corre y abraza a Maité, la rodea con sus patas cortas y su enorme cuerpo alargado y la besuquea una y otra vez.
Mide medio metro del suelo a la cabeza y un metro de largo.
Es un personaje” dice la administradora de Fundación de Rescate y Adopción de Mascotas (FRYAM) al referirse a Duque, quien camina, se contonea y parece sonreir a todo mundo, donde convive con 200 animales entre perros, gatos, cotorros, tortugas, patos y ratones.
Este animal es como un pequeño humano, que llora, pero que no se adapta a cualquier ser humano.
“Duque si se adaptó a sus compañeros, a la perrada pues”, dijo Maité.
Recuerda que cinco veces lo adoptaron pero las cinco veces prefirió regresarse al Refugio: y eso lo entendían sus dueños cuando no quería comer y se ponía triste y ahí va de nuevo para su antigua casa.
El Bellinghausen parece que sabe que están hablando de el, pues se pasea y rodea a la encargada de la casa hogar y del pequeño espacio de la estancia y observa al entrevistador.
En un ínter, nos metimos a otra habitación donde un gato aullaba, un perro ladraba y un cotorro imitaba las voces de todos.
Aquí hay de todo perros sanos, otros enfermos, algunos se recuperan de heridas físicas. Pero con amor, curaciones y cuidados se van curando.
Es la historia de Duque, quien ya tiene novia, una perra parecida a el, pero enferma de cáncer.
Por otra parte Maité recomienda a la gente que no eche a la calle a sus mascotas porque corren peligro de maltrato, que mejor los lleven al refugio.
El FRYAM lo fundó Maité hace diez años, después de sufrir una serie de dolorosos fallecimientos en su familia, incluido su esposo.
Están ubicados sobre la calle Nuevo León, casi esquina con Herón Ramírez en la colonia Longoria.
Una perrita que le regalaron le sirvió de compañía; y un buen día decidió comprar el edifico para cuidar a decenas de animalitos como Duque.
ALBERGUE. Fundación de Rescate y Adopción de Mascotas.
